“El triunfo de una es el triunfo de todas: Celina García, Mujer destacada en educación en Lagos de Moreno

Por: Celia Espinoza Serrano

12 de marzo 2022.- Con reconocimiento a todas las mujeres que trabajan y luchan en el anonimato se pronunció Celina García Panuco, galardonada con la Presea Mujer Destacada en la categoría educativa por parte del Gobierno de Lagos de Moreno y estatuilla que se entregó con motivo del “Día Internacional de la Mujer”.

De profesión Psicóloga por la UNIVA, ha desarrollado programas comunitarios tales como “Escuela para Padres” en el Jardín de Niños “Josefa Ortiz de Domínguez” en Lagos de Moreno. Además de impartir talleres de manejo y expresión de emociones y llevar a cabo un amplio trabajo como terapeuta de jóvenes, adultos y familias.

También ha organizado campañas de fraternidad y participado en foros de discusión con perspectiva femenina, sin dejar de resaltar su trabajo de acompañamiento personal con alumnos o sus terapias individuales, grupales y de pareja.

A nombre las galardonadas con la presea Mujer Destacada, Celina tomó el micrófono para alzar la voz y reconocer a todas aquellas mujeres que cada día luchan por ser mejores y por hacer mejor su entorno, pero lo hacen en el anonimato y no esperan un reconocimiento como el que ella recibió.

A continuación dejamos el texto de su valiosa intervención:

Me ha costado trabajo entender por qué me dan este reconocimiento el día de hoy y después de un exhaustivo análisis sé que no se trata de un síndrome del impostor que me haga sentir que no lo valgo, es más bien que sé que no tendría que ser así, para empezar porque no veía diferencia entre yo y Juana que rola turnos, con Xóchitl que es mamá soltera y tiene dos trabajos, o Verónica que se queda en casa y vende Tupperware para tener un extra. Después me detuve a pensar aún más en cómo la persona que la mayor diferencia es el tema de las oportunidades. Hoy nos reconocen por ser grandes mujeres que han tenido la oportunidad de serlo, cada quien en su ámbito, y me refiero a que no vivimos en un país en guerra, no fuimos vendidas a nuestros esposos, ni fuimos obligadas a quedarnos en casa, tuvimos la oportunidad de nacer en una casa donde se nos inculcó el estudio, la búsqueda del conocimiento y los logros personales, se nos impulsó cada día hasta hoy. Nuestro punto de partida fue el privilegio y como tal no puedo más que aceptar que cada día de mi vida estoy en deuda con quienes no lo tienen, y lamentablemente es un número muy grande.

Hoy más que nunca me siento con la enorme responsabilidad de hacer algo con el privilegio que tengo sin haberlo pedido, y usarlo como trampolín para ayudar en lo que me sea posible para cerrar un poco la brecha entre hombres y mujeres, así como la que hay entre otras mujeres y yo, y por mucho coraje que eso me dé.

Esta voz sabe que nunca será un ‘felicidades’ hasta que todas seamos igualmente libres de estudiar, trabajar en lo que queremos, decidir realmente el tipo de gobierno que queremos tener, caminar tranquilas con la ropa que nos plazca, que nos paguen acorde a nuestro desempeño y no a nuestro género. Que decidamos libremente unirnos a quien queramos sin importar si es hombre o es mujer. Que la ropa no decida si llegamos seguras a nuestros hogares. El día que podamos decidir con libertad en nuestro cuerpo y el día en que no nos falte ninguna.

Hoy tomo este reconocimiento no sólo de quien nos haya elegido como ‘merecedoras’ sino en nombre de todas aquellas mujeres que jamás serán nombradas o reconocidas, porque el triunfo de una es el triunfo de todas.